Acabo de terminar de hojear la página final de un blog, de alguien que puso empeño en sus publicaciones y fantasía que gustaba a muchos, lo digo por sus visitas y por la cantidad de personas que hacían comentarios en él.
Se despidió sin mucha cortesía, diciendo la verdad como de costumbre y ésta era sin duda su gran realidad, aunque como dice él con la fantasía que separa el blog y el día a día.
Qué esperamos de un blog?
Qué nos llena tanto, que luego pasa a la historia?
Donde empieza el hobby y empieza la obligación?
Porqué y para quien publicamos?
Cual sería la forma correcta de plantear la dosificación sin llegar a envenenar?
Qué es lo que no nos gusta de nuestro blog y porqué?
Mientras cerraba el blog que os cuento y abría el escritorio del mío, salto un ¿Spam? en el monitor que me invitaba a abrir un nuevo blog, AQUI.
Hace un mes o algo así yo abrí un nuevo blog y lo titulé "Lagos Azules". Y, ¿Porqué si ya tengo un blog que de momento me mola? Quizás porque las bellas poesías que en él se alojan no merezcan sitio en el mundo urbano, ¿O sí?, ¿a lo mejor es que la42nomolatanto y tengo una puerta abierta para salir cuando se me terminen los argumentos?
Personalmente creo que a mí como a la vida, mi vida; es imposible no aprender algo diariamente con la gente en un taxi que no para de pulir el suelo de Zaragoza.
Espero no cansarme tan pronto como EL, y si algún día me canso que no sea de vivir.
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