Llego a la conclusión que hay cosas que no se las merece nadie, por muy mal camino que hayan elegido en su vida.
El otro día, en un semáforo giré la cabeza y observé cómo una mujer de unos veinticinco años recogía la ropa de sus pequeños del tendal. Nunca hubiese pensado que en ese montón de escombros pudiese vivir alguien en esas condiciones.
De repente salió una niña de unos dos añitos quizás, con la sonrisa mezclada en tanta miseria.
El semáforo se puso verde y no me dió tiempo a más, pero fué suficiente para horrorizarme con aquel flash y llorar en silencio . Yo tengo también una niña como aquella y por ella sería capaz de todo, ante la indefensión de un niño.
Todo mi esfuerzo, todo mi cansancio y todo mi deterioro físico con el paso del tiempo, no resulta en vano cuando miro la mirada dulce de mis niñas reposando en mi persona.
- Ése es el verdadero amor y no el que predican otros con los brazos cruzados.
- Eso es lo verdaderamente importante en un mundo de absurdeces y mentiras.
3 comentarios:
Nuestros hijos son lo más importante de nuestras vidas...TE AMO
Tenemos la capacidad de asombrarnos, asustarnos, entristecernos, llorar, tener miedo por los que nos rodean, todo esto ningún mal nacido nos lo va a quitar, los poderosos cerraron su corazón, nuestra alma tiene la luz de nuestros ojos, que siguen vivos.
En ocasiones las lágrimas afloran a nuestros ojos.
Recuerdo que siendo crío, en el pueblo de mi padre había una anciana muy mayor que cuando le dabas los buenos días y le preguntabas algo así como ¿qué hay?,invariablemente te contestaba "Mucho y muy mal repartido"
Poco a poco me fuí dando cuenta del significado de la frase.
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